Aun lo recuerdo tenía 6 años, mi única experiencia en el aire era en las ruedas en las fiestas Julias, salimos del aeropuerto Internacional, me impresionó que llegamos a la pista y abordamos por la puerta lateral por una escalinata, me llamó mucho la atención ver el enorme tamaño de la nave que era de 4 motores de la empresa TACA, nos acomodamos en las butacas y el avión tomo pista y poco a poco ganamos altura, no con la velocidad que lo hacen hoy que uno se siente pegado al asiento, al llegar a altura de crucero, nos recomendaron desabrochar el cinturón, al momento las azafatas sirvieron un sándwich y llegamos a Guatemala hicimos como 45 minutos descendimos y aterrizamos en el Aeropuerto la Aurora este lo conocía porque un gran amigo trabajaba con Panamerican y nos estaba esperando y uno de los sobre-cargos era Jorge Papahui amigo de la familia así que tendríamos buena atención, nos elevamos sin problemas y pudimos ver el lago de Atitlan que tiene forma de 8.
Nos sirvieron el almuerzo que era un filete miñon delicioso, puré de papas de postre u pai de manzana soda, me recomendaron que comiera despacio, cundo llegamos al golfo de Yucatan comenso una tormenta con muchas bolsas de aire, aquí me arrepentí de haber comido tanto, la nauseas y el consiguiente vómito, entonces conocí bolsas que están en los asientos de los aviones, las azafatas me llevaron al baño y me limpiaron, hubiera deseado que la tierra me tragara.
La vergüenza desapareció al ver el Popcatepel y la mujer dormida esta si la vi pero la figura del guerrero del Popcapetel no lo vi. Llegamos a aeropuerto de México.
Se acabuche lambeme el buche.
La vergüenza desapareció al ver el Popcatepel y la mujer dormida esta si la vi pero la figura del guerrero del Popcapetel no lo vi. Llegamos a aeropuerto de México.
Se acabuche lambeme el buche.