Hace algunos años cuando comenzaba a tener éxito la medicina alternativa legaba un colega 3 veces por semana y se le reunía personas para que recibieran las charlas una señora que era asidua oyente llevaba a su nieto, una secretaria preparaba refrigerios y refrescos los vendía a los asistentes este simpático niño la abuela le daba sus centavos y algo compraba.
Un buen día llegó donde la secretaria y pidió de todo y se repitió entonces la secretaria le cobró y el niño corrío donde su abuela y regreso a los pocos momentos y le dice fijese señolita que tengo un glan plobema que la abuela olvido la pistela y no le voy a pagal.
Fue la última vez que llegó a las charlas.
Se acabuche lambeme el buche.
Fue la última vez que llegó a las charlas.
Se acabuche lambeme el buche.
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